Hoy va por ellos, por todos aquellos abuelos moraos de los de siempre. Tienen en quién fijarse: en la Madre de nuestra Reina y la abuela de nuestro Moreno. De voz callada, al igual que Joaquín, pero de corazón eterno y humilde. Sí, aquellos que viven más allá de la Plaza del Cristo Marinero y que cada viernes nos regalan una sonrisa a los pies de su Señor de la Misericordia. ¡Qué Hermandad más completa aquella que un día emprendió con ilusión la responsabilidad de cuidar a los abuelos de nuestro Señor!
Valoremos la labor de nuestros mayores en la Hermandad. ¡¡¡A ellos les vas a hablar del twitter, de los Jóvenes Moraos o de la Pastoral de Juventud Cofrade!!!….no les importa, les importa su Moreno y que esto vaya hacia delante y lo hacen de la mejor forma posible, que es confiando en ellos porque tienen plena confianza en que sabrán llevar el carro morao para la eternidad.
¡¡¡FELICIDADES ABUELOS, MORAOS PARA SIEMPRE!!!
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